Las fugas en las instalaciones industriales son parte de los paradigmas que deben evoulcionar, hoy dia, por ejemplo si revisamos los requesitos para colocar en operación una junta soldada, tendríamos por mencionar algunos, tintes penetrantes, ultrasonido, rayos X, por la parte de ensayos y por la parte de mano obra, certificación de soldador, probetas, etc, ahora bien si revisamos los requesitos para el armado de una junta bridada, toma un tiempo encontrar alguno, en ocasiones alguna inspección visual, para revisar la calibración del manómetro, que dice muy poco del resultado esperado. En una instalación industrial ocurren entre en promedio 180 fugas por año, de estas fugas entre 1 y 4 son de alto impacto, con alto impacto identificamos fugas u eventos cuya consecuencia generó accidentes personales, incluso fatalidades, daños ambientales, perdidas de oportunidad de producción, etc. La mejor práctica para el manejo de las juntas bridadas, es sin duda incorporarlas al sistema gerencial de integridad mecánica de la instalación, teniendo en cuenta cada uno de los componentes del sistema y su relación con la integridad de las juntas, bajo un enfoque de riesgo que permita obtener la mejor relación costo, riesgo y beneficio.